Los investigadores han simulado la explosión de un asteroide similar al que se acercará a la Tierra en 2029 a una distancia de 38.000 kilómetros.
Un grupo de científicos rusos de las ciudades de Tomsk y San Petersburgo que trabajan en el desarrollo de medidas preventivas de protección de la Tierra de los cuerpos celestes potencialmente peligrosos han simulado la explosión nuclear de un asteroide de 200 metros en diámetro de modo que sus fragmentos no lleguen a la Tierra, informa la Universidad Estatal de Tomsk.
La mayoría de los objetos peligrosos pasa varias veces cerca de la Tierra antes de chocar contra esta. Por lo tanto, el método que han propuesto los científicos consiste en hacer explotar el asteroide cuando se aleja de la Tierra en lugar de cuando se acerca. Esta medida es mucho más eficaz y segura, explican los expertos.
Para la simulación por ordenador, se ha escogido un cuerpo celeste de 200 metros de diámetro parecido al asteroide Apofis que en 2029 se acercará a la Tierra a una distancia de 38.000 kilómetros. De acuerdo con los cálculos, para su destrucción es necesario el impacto de un dispositivo nuclear con la emisión de energía de 1 megatón de TNT.
Un impacto de tal fuerza convertiría una parte del asteroide en gas y gotas de líquido, mientras que otra parte se desintegraría en fragmentos menores de 10 metros. Este tamaño es el máximo permitido para garantizar la seguridad de la Tierra.
«Cabe añadir que las explosiones nucleares en el espacio están prohibidas por un acuerdo internacional, pero en el caso de una amenaza real para la humanidad, se puede hacer una excepción a esta regla», ha explicado la colaboradora de la Universidad Estatal de Tomsk Tatiana Galúshina.
fuente:RT