El secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática aseguró que la medida busca «polarizar» la sociedad
El secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús «Chúo» Torrealba, aseguró que la denuncia presentada por diputados oficialistas contra el presidente de Empresas Polar, Lorenzo Mendoza, busca «polarizar» la sociedad con un objetivo «electorero».
«Este es un régimen absurdo y su lógica es absurda, esto lo hacen por un mero afán politiquero y electorero, el señor Maduro está desesperado por repolarizar al país como estaba hace diez años», dijo.
El vocero de la MUD calificó de «agresión» contra Mendoza, propietario de Polar, esta denuncia que se presenta a solo semanas de las elecciones parlamentarias del próximo 6 de diciembre.
«Ese es el cálculo primario, básico, que está haciendo Maduro, creer que la ofensiva contra Lorenzo Mendoza, que la agresión contra el presidente de empresas Polar puede recolocar en Venezuela aquella vieja polarización entre ricos y pobres», comentó.
Torrealba agregó que esta denuncia «tiene que ver con una manipulación hacia el país» y agregó: «ojalá que este Gobierno tuviera la mitad de la eficiencia que ha demostrado, generando alimentos, generando bienestar, empresas Polar».
Un grupo de diputados oficialistas presentó en la Fiscalía denuncias contra Mendoza y el economista Ricardo Hausmann por «traición a la patria» y «asociación para delinquir», entre otros.
El diputado chavista Pedro Carreño dijo tras consignar el documento ante el Ministerio Público que esta denuncia contempla que Mendoza podría haber incurrido en delitos «como usurpación de funciones y delitos contra la independencia, la soberanía y la seguridad de la nación».
La denuncia tiene que ver con una conversación telefónica privada que Mendoza y Hausmann, director del Centro para el Desarrollo Internacional de la Universidad de Harvard.
En esta conversación, difundida por el presidente del Parlamento venezolano, el oficialista Diosdado Cabello, la semana pasada, Mendoza avala el planteamiento de Hausmann sobre la necesidad de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) conceda un préstamo de 40.000 a 50.000 millones de dólares a un futuro Gobierno que suceda al de Maduro.
El pasado 16 de octubre Mendoza salió al paso a las acusaciones del chavismo emanadas de la conversación con el economista en un comunicado en el que manifestó su rechazo «contundente» a los «intentos de manipular a la opinión pública» con intención, dijo, de querer utilizarle «en la política venezolana».
Mendoza, acusado por Maduro del desabastecimiento y escasez de alimentos que el país afronta en la actualidad, dijo en su texto que regularmente conversa con economistas de distintas tendencias y puntos de vista para conocer sus opiniones sobre la situación económica del país.
El FMI aseguró que «no hay negociaciones para un programa de apoyo financiero para Venezuela», en respuesta a los señalamientos del chavismo de que la institución está diseñando un plan de ajuste económico.