Posteriormente, al darse cuenta que habían asientos disponibles en “Clase ejecutiva” deciden aprovecharse de su condición de personalidades públicas y cambiarse de “clase económica” para ejecutiva aprovechando los puestos disponibles, mientras sucedía todo iba normal.
Luego los pasajeros comienzan a quejarse, puesto que desde el momento que Chino sube mantiene una conversación con el resto de los integrantes del grupo de una forma bastante enérgica y con un tono de voz bastante alto utilizando palabras soeces y su expresión favorita mari… la cual resulta grotesca a los pasajeros.
Este comportamiento duró un buen rato mientras Chino seguía utilizando su palabra favorita para dirigirse hacia sus compañeros de grupo, resultando desagradable para las personas abordo que permanecían en la clase ejecutiva y los empleados de la aerolínea viendo el mal rato que pasaban los pasajeros, decidieron manifestarle a Chino y Nacho que no se les podía realizar dicho cambio.
A todas estas, mientras los minutos transcurrían y los pasajeros seguían con su descontento por el retraso que llevaba un poco más de una hora, el Jefe de la tripulación les hace saber que deben embarcar rápido para iniciar el vuelo hacia Maracaibo.
Esto fue suficiente para que las personas que permanecían a bordo del avión y estaban en clase ejecutiva se sintieran complacidos y manifestaran que no querían tener a su lado a una persona que tuviera un lenguaje tan soez y a tan elevado volumen como el de Chino.
Sin embargo, éstos aplaudieron el comportamiento de Nacho que sin duda alguna comentaron que todo el tiempo se portó como una persona normal y de buenos modales lo que lo difería de su acompañante.
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