Esa cifra supondrá además tener cuatro veces más torres que Estados Unidos.
Actualmente, en China, la ciudad con más edificios que superan esa medida son Hong Kong, con 58 edificaciones, Shanghái (este) con 51 y Shenzhen (sur) con 46.
Sin embargo, con la medida estándar china de 100 metros, Shanghái computa unos 6.000 rascacielos, 400 de ellos en su distrito financiero.
El informe, que se basa en un estudio hecho durante un año sobre los edificios más altos de China, señala que este año el país empezó la construcción de 200 rascacielos más, cantidad que iguala la del número de torres que tiene EEUU.
Expertos citados por el “Global Times” dijeron que la construcción de rascacielos, que en un inicio tenía como objetivo el ahorro de terreno, se ha convertido ahora en un proyecto de construcción de la imagen de China.
Por otro lado, los analistas también mencionaron los problemas que este tipo de edificaciones en altura puede causar al país.
Para Wang Jianmao, economista citado por el “Global Times”, aunque la construcción de rascacielos es esencial para la urbanización de China, antes de aprobar estos proyectos, las autoridades tienen que recordar los altos costos de construcción, mantenimiento y los problemas ambientales que pueden causar.
Por otro lado, los especialistas alertan también sobre la posibilidad de que los constructores de esta torres se enfrenten a deudas gigantescas de no poder vender o arrendar los espacios a tiempo.
La construcción de rascacielos es un fenómeno popular en toda China, inclusive en las ciudades que tienen menos de un millón de residentes.
Por ejemplo, en la villa de Huaxi (este), famosa por ser la más rica de China y que cuenta con 1.500 habitantes, este año se culminará la construcción de una torre de 328 metros de altura, edificio que será uno de los más altos del país.