Esto implica que en 2 años el Gobierno contrató un financiamiento que representa 86,8% del endeudamiento de la República. De esa manera, China se convierte en el principal acreedor del país, aunque en este caso los pagos no se hacen en dinero sino mediante el envío, por Petróleos de Venezuela, de crudo o productos derivados.
En los datos de la deuda pública externa tampoco se incluye la deuda financiera de Pdvsa, que al cierre del primer semestre fue de 21,9 millardos de dólares. Significa que si este monto se suma al saldo de la deuda contratada por la República, más el financiamiento aportado por Pekín, se llegaría por encima de 96 millardos de dólares. De esa cantidad un tercio se debe a China.
Los cálculos indican que esta cifra superó 100 millardos de dólares al cierre de 2010, considerando las emisiones de bonos de deuda que hizo Pdvsa y nuevos préstamos con organismos multilaterales.
La banca de inversión Barclays emitió un informe a finales de 2010 donde advierte que la deuda pública del país llegará a 112 millardos de dólares en 2011, al sumar todas las obligaciones que debe el Gobierno, incluidas las contratadas internamente. Representaría 53,7% del producto interno bruto.
Expertos aseguran que esa cifra alcanzó 120 millardos de dólares por los préstamos que tienen otros organismos del Estado, como la Corporación Venezolana de Guayana y el Bandes.