Chávez y sus misiones ¿Trampa caza votos o beneficios para los pobres?

   ¿Trampa caza votos o beneficios para los pobres? La adivinanza se la formulan en estos momentos unos cuantos analistas políticos que evalúan cuál es la estrategia del presidente Hugo Chávez al estrenar o relanzar sus tan cacareadas misiones. En lo que va de 2011 lleva tres nuevas y dos reeditadas. La campaña para la reelección apenas comienza, reseña La Verdad.

El día del trabajador, el 1 de mayo, anunció la que podría ser una de sus más ambiciosas propuestas: “Vamos a dar trabajo y más trabajo para tener patria”. El jefe de Estado prometió lanzar la Gran Misión Trabajo.

Fecha y promesa clara: Incorporar entre 2011 y 2019 a unas 3,5 millones de personas al campo laboral venezolano.

Según la más reciente encuesta del Instituto Venezolano de Análisis y Datos (Ivad), los principales problemas que enfrenta el país son la inseguridad (85,3 %), el desempleo (41,3 %) y la falta de vivienda (20 %).

Esto el Presidente lo tiene claro y sabe que su reelección depende de revertir estas cifras, así sea a punta de promesas. Fue entonces cuando en abril de este año lanzó con bombos y platillos la Misión Vivienda Venezuela, la cual lleva más de dos millones de personas censadas, y en el segundo semestre espera repetir la hazaña con la Misión Trabajo.

“A &39;Chacumbele&39; (Chávez) ya le resulta cada vez más difícil creerle. Pero él, como charlatán de feria, sigue vendiendo esperanzas, así estas sean apenas un pálido remedo de la que despertó hace diez años. Operación electorera más desvergonzada que esta no recuerda este país”. El periodista y escritor Teodoro Petkoff lo afirmó en uno de sus últimos editoriales del diario Tal Cual. La feria de nuevas misiones es una estrategia del Presidente para cambiar “certificados de un espejismo” por votos.

Cifras al desnudo

La fuerza activa de trabajadores en este momento se ubica en 13 millones 140 mil venezolanos, y según el Instituto Nacional de Estadística (INE), hasta abril la tasa de desempleo cerró en 8,1 por ciento, que representa un millón 100 de desocupados. La propuesta entonces del Gobierno nacional es avanzar hacia “un quiebre total del desempleo en Venezuela”, con la incursión de los más de tres millones de personas que pretenden incursionar al campo laboral con la ayuda de las misiones.

Pero la visión que tiene Fedecámaras, como la organización de empleadores más representativa del país, dista de la propuesta oficialista. Sus cifras no son tan optimistas. “En Venezuela el desempleo está en 51 por ciento (seis millones aproximadamente). El 8,1 por ciento del INE, tal como ellos lo ven, tiene el autoempleo como un empleo, y esa gente no puede considerarse como que son empleados”, explica el presidente de Fedecámaras-Zulia, Néstor Borjas, para quien el hecho de que este grupo no tenga beneficios sociales ni genere impuestos al Estado significa que no pueden ser tomados en cuenta como parte de estas cifras.

Tal como lo afirma Borjas, la meta que se asigna el Gobierno de incluir 3,5 millones de venezolanos en ocho años es una promesa que se queda corta ante la realidad nacional. “Ellos lo que no están considerando es que hay cuatro millones de personas que no quieren ser empleadas, sino que quieren hacer microempresas. En lugar de una Misión Trabajo, lo que deben hacer es una Misión Emprededores”.

Una promesa candidatural que lo que busca es atrapar votos para el 2012 es el objetivo último que le dibuja el vocero de Fedecámaras a este nuevo programa social. “Todas las misiones y lo que venga de ahora en adelanta es estrictamente electoral. La Misión Trabajo es otra campaña, pero le damos la bienvenida porque con ella de seguro se generará un nuevo censo, que a nosotros nos sirve para construir estadísticas de cómo está el país”.

Casas para cazar

La primera misión para atrapar votos de este año fue la Misión Vivienda Venezuela, que se une la Agro Venezuela y el relanzamiento de Mi Casa Equipada.

“Los nacionales en estos días están esperanzados en ganarse la lotería con una de esas promesas del Gobierno, llenando los exigencias burocráticas de los amos del circo, previo a una campaña mediática sin precedentes, cuyo trasfondo es la venta de ilusiones a través de una bien orquestada trampa ‘caza votos’ para intentar reelegir, otra vez, al mandamás de Barinas”.

Para el sociólogo César Arismendi, el Gobierno nacional tiene una “inmensa deuda social” con el país que difícilmente la podrá cubrir con estos nuevos programas.

Aquella audaz promesa de construir este año y el próximo al menos 350 mil viviendas se desvanece cada vez más. Para la oposición es un desafuero demagógico imposible de consolidar, pues en lo que va de 2011 ya deberían estar construidas casi la mitad de las 150 mil casas prometidas para este año.

El politólogo Jesús Castillo Molleda advierte que por más demagogia que esto resulte, la estrategia que emprende el Presidente es un boleto de lotería para el venezolano y que da buenos dividendos en temporadas electorales. “No importa si cumple o no ni si da todas las casas que prometió, el hecho es que si otorga al menos cinco por ciento de lo que dice, es suficiente para que alguien diga: ‘Si a él le tocó, a mí también me puede tocar’”.

Por eso le propone a los dirigentes opositores “salirle al paso y aceptar sus propuestas. Ofrézcanle terrenos, materiales de construcción, pónganseles a la orden. No solo es criticar por criticar. Finalmente será él el que quede como mentiroso”.

Para derrotarlo

El consultor político Édgar Gutiérrez advierte de la manera cómo se tiene que enfrentar al presidente Chávez en promesas populares de este tipo. A su juicio, hay que aplicar “estrictamente una política de contraloría a cada anuncio oficial realizado y verificar sus alcances. Hay que hacer evidentes los fracasos e inclusive los anuncios fantasmas que se hacen desde el poder”.

Para el analista, cuando desde el Ejecutivo sale una propuesta social de este tipo, se está trabajando de manera “orquestada” con todos los poderes y todos los ministerios. De allí que recomiende no subestimar estas promesas tan organizadas y con tanto poder mediático.

“Es  necesario proponer, proponer y proponer. No me cansaré de sugerirlo. Es el sector opositor quien sí está en la cómoda posición de prometer, pero debe hacerlo de manera inteligente y constructiva. Por ejemplo, anunciar un plan de vivienda en el que se trace una gran alianza con el sector privado y bancario sería algo muy interesante y claramente diferenciado de lo que hoy se hace desde Miraflores”.

Las caza votos

Desde su llegada al poder, el presidente Chávez ha lanzado no menos de 30 misiones. Las que hoy lo mantienen “vivo” en las encuestas son:

·           Misión Vivienda Venezuela. Creada en abril de 2011. Se propone crear 2 millones de viviendas antes del 2012 e identificar un registro detallado para la construcción de casas en todo el país.

·           Mi Casa Bien Equipada. Se relanza este año y promete que en septiembre de 2012 inaugurará una fábrica de electrodomésticos para ser adquiridos hasta con un 50 por ciento de descuentos. Espera vender 3 millones de electrodomésticos en 2011 y 2012.

·           Misión Trabajo. Estrenará el segundo semestre. Pretende emplear a 3,5 millones de personas entre este año y 2019. En 2011 aspira a incorporar al campo laboral a un millón 100 desempleados, además de los 260 mil trabajadores que se suman anualmente.

Cifras oficiales de empleo

1.124.765 personas están desempleadas.

La tasa de despidos está en 7,7%.

La tasa de informalidad laboral abarca 42,6% de la población, que equivale a 5.118.536 trabajadores.

La  ocupación formal engloba a 57,4%, lo que representa a un total de 6.904.105 personas.

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