En tal sentido, el mandatario expresó que era un revolucionario y también marxista “y por primera vez asumo el marxismo, como asumo el cristianismo y el bolivarianismo y el sandinismo y el martianismo y el sucrismo y el mirandismo”, destacó.
Añadió Chávez que “el marxismo es la teoría más avanzada en la interpretación científica de la historia, de la realidad y es sin duda, la más avanzada propuesta hacia el mundo que Cristo vino a anunciar aquí en la Tierra”, dijo.
Posteriormente, el Presidente se ha referido a sí mismo “Yo, como marxista”.
Sin embargo, y de forma insólita, ha reconocido que no ha leído “El Capital” (el libro básico del marxismo) y que estas Navidades se lo regaló el Ministro Alí Rodríguez, quien también, según Chávez, es marxista.
Acabar con el estado burgués
“Como marxista”, Chávez, ha señalado que hay que acabar con lo que quede del estado burgués: “Hay que quitarle el oxígeno el estado burgués”.
Posiblemente, con estas palabras del Presidente, los venezolanos entiendan el sentido de todas las medidas que el Gobierno nacional está adoptando y que atentan directamente con la existencia misma de las empresas privadas, algo imposible de existir en un “estado marxista”.