El fabricante chino Huawei ha mostrado en la feria CES 2013, que se celebra en Las Vegas, el Ascend W1, un dispositivo de gama media, destinado para todo tipo de bolsillos. Con procesador Qualcomm Snapdragon S4 de doble núcleo a 1,2GHz y una tarjeta gráfica potente, GPU Adreno 305, este fabricante quiere hacer valer una escasa pantalla de 4 pulgadas. La cámara llega a 5 megapíxeles en una grabación HD 720p.
Este es el primer teléfono de esta firma que cuenta con Windows 8 para hacerlo funcionar. Junto con esta incursión, Huawei ha presentado también esta semana otros dos «smartphones», ambos con Android JellyBean 4.1, el Ascend Mate y el Ascend D2. Abrazando a las «tablets», Panasonic ha sorprendido con la presentación de un «monstruo» de 20 pulgadas y una resolución 3840×2560. Asegurado por la propia compañía japonesa.
El apoyo más fuerte, quizás, es de Nokia, que reverdece sus encantos pasados con el Lumia 920 y, cuyo sucesor, que vería la luz a final de año, podría ser construido en aluminio, según informaba «The Verge». De esta manera, volvería a incorporar una carcasa de este material como ocurría en modelos anteriores de la firma.
En esa lucha se encuentra HTC, la otra firma que pretende elevarse como la «marca Windows Phone 8». El fabricante taiwanés lanza dos «smartphones», 8X y 8S, que funcionan con la última versión de este sistema operativo móvil, lo que representa competencia de gran altura para Nokia, justo en el terreno en el que ha depositado sus esperanzas.
Pese a las críticas y a las dudas, Microsoft asegura haber comercializado 60 millones de licencias de su nuevo sistema operativo Windows 8, que llegó al mercado el pasado 26 de octubre, una cifra que está conformada por las actualizaciones desde Windows 7 y las ventas de nuevos equipos, pero las ventas del sistema móvil son cinco veces superiores a las de 2011, según aseguraba la propia compañía. ¿Tendrá hueco en las actuales apuestas?
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