Esta serie final no tuvo nada de sencilla para un equipo de Caribes que tuvo que superar a un poderoso y temible conjunto de Aragua, que siempre, hasta el último momento, estuvo luchando por su trofeo.
La tribu quiebra entonces una racha de dos campeonatos de equipos locales perdiendo el último juego en casa, anteriormente Magallanes (2010) y Leones (2009) habían perdido el séptimo juego en casa.
En esta ocasión un hubo titubeos, Caribes arrancó la fiesta temprano, desde la primera entrada atacaron al novato César Ciurcina, quien recibió doblete de Endy Chávez para comenzar la fiesta, luego de dos outs, jonrón de Luis Jiménez, en cuenta de 1-0 puso a soñar a Caribes al colocar el marcador parcial a su favor 2×0.
César Suárez quiso unirse a la fiesta y en cuenta de 1-2, también le sacudió cuadrangular solitario al novato para poner la pizarra 3×0, temprano estaba Caribes al frente.
Otras tres llegaron en la baja de la segunda, ahora cortesía de la “pesadilla” Josh Kroeger, quien le recordó a sus rivales, porqué fue votado el JMV de esta temporada regular.
Con un out en la pizarra, Jonathan Herrera pegó uno de sus tres hits en el juego, luego de que César Ciurcina ponchara a Endy Chávez, otro sencillo ahora de Alexi Amarista a la derecha sirvió la mesa para el zurdo, Kroeger dejó pasar dos envíos malos y el tercero no lo peló, sacándola de jonrón por la derecha para aumentar la ventaja a 6×0.
En ese momento parecía que se le escapaba el juego a los Tigres, pero si algo nos ha enseñado este equipo durante su dinastía, es que el peor error que se puede cometer es considerarlos fuera de contienda.
Aragua se las ingenió para llenar las bases con dos outs en la alta de la tercera ante el joven José Álvarez, Julio Franco fue al bullpen y trajo a Kendy Batista, pero este estuvo inefectivo, golpeando a Lastings Milledge para forzar el 6×1.
Batista luego dio pasaporte a Héctor Giménez para forzar el 6×2, momento en que el manager oriental volvió a acudir al bullpen y en esta ocasión trajo a Alex Herrera para enfrentar a Tyler Greene.
En una jugada poco vista, Herrera incurrió en lanzamiento descontrolado, sin embargo Gustavo Molina le llegó a la bola y tenían el out en la goma de Jesús Guzmán, pero a Alex Herrera se le fue la bola permitiendo que Guzmán anotara el 6×3, no contento con eso, en la jugada se vino desde segunda Lastings Milledge y también piso el plato para el 6×4.
Sin embargo, en la cuarta reapareció Luis Jiménez, quien con las bases llenas y un out, se vieron obligado a jugarle con el cuadro normal, eso fue beneficioso para él, ya que se fue por su banda pasando con su batazo la pelota justo donde hubiese estado el camarero de haberle estado jugando con la formación para zurdo, el sencillo permitió que se colaran dos para el 8×4.
Pero los Tigres respondieron de inmediato, con dos outs en la quinta, cuadrangular por la derecha de Jesús Guzmán recortaba la distancia a 8×5, diferencia que se mantuvo hasta la novena.
Aquí comenzó el ataque de los Tigres, quienes le montaron corredores en las esquinas a Alex Herrera con un out, José Martínez entró a batear y respondió con hit a la izquierda que trajo el 8×6.
Todavía con corredores en las esquinas vino a lanzar José Cabrera, quien retiró a Luis Maza, pero luego recibió sencillo al centro de Alex Romero que puso la pizarra 8×7 y la del empate en tercera con dos outs. Wilson Ramos vino a batear, pero Cabrera le obligó a batear manso elevado al jardín central, en el guante de Kroeger cayó el out 27, que concretaba la victoria 8×7 de Caribes, que les da su primer campeonato en 20 temporadas en la LVBP.
(JUGADA CLAVE)
La baja de la primera entrada fue clave en este encuentro, con dos outs y Endy Chávez corriendo en tercera, Luis Jiménez vino a batear y eso obligó a los Tigres a mover al cuadro para proteger el lado derecho.
Con Jesús Guzmán jugando prácticamente en el campocorto, Endy Chávez tomó una ventaja suicida entre tercera y el plato, brincando de acá para allá, puso a Ciurcina a pensar más en él que en el bateador Luis Jiménez, cuando por fin le lanzó, le sacudieron jonrón que dio ventaja a los locales.
(EL DATO CURIOSO)
Le tomó dos décadas al equipo de Caribes de Anzoátegui lograr su primer campeonato, pero no existe mejor forma de celebrar su cumpleaños que con su primer trofeo en la LVBP, la gente en Puerto la Cruz se lo merece por verdaderamente apoyar a este equipo de principio a fin esta temporada. Y el conjunto se lo ganó a pulso, batiendo a los poderosos Tigres en siete emocionantes duelos.
EL GIGANTE DE BOBARE
Luis Jiménez marcó el camino del equipo oriental, su cuadrangular de dos carreras en la primera entrada los puso a soñar, mientras que su sencillo para poner dos más en la cuarta, dio tranquilidad a un equipo que había cedido un colchón tempranero de manera inesperada. Durante toda la serie este toletero fue clave para Caribes, sellando con su actuación de anoche su gran trabajo en esta serie final.
RAMOS FALLÓ
El cuarto toletero de Tigres, Wilson Ramos, falló en tres ocasiones claves que pudieron haber reescrito la historia de este duelo. En la primera entrada con hombres en las esquinas y un out se ponchó. En el tercer tramo nuevamente con dos en base y un out se volvió a ponchar. Y finalmente en la novena, con la del empate en tercera y la de irse arriba en primera, elevó a la derecha para darle el trofeo a Caribes.
¡Qué privilegio!
Ejercer esta profesión es la mayoría de las veces gratificante, el deporte suele siempre llenarnos con momentos de gloria y son pocas las ocasiones que a uno le toca dar cobertura a eventos negativos.
Sin embargo, entre pocas horas de sueño, muchas horas de carretera y más momentos de stress que de tranquilidad, nos llegan momentos que son mucho más especiales, aunque difícil de creerlo, que los que solemos cubrir.
Anoche fue uno de esos momentos, nos tocó reseñar algo que a principio de temporada para quizás cualquiera de nuestros colegas era impensable, el campeonato de Caribes de Anzoátegui.
Sin embargo, lo que hace verdaderamente especial haber podido estar en primera fila para presenciar todo esto, lo que convierte esta hazaña en un privilegio, fue el hecho de que muy, pero muy pocas veces a un periodista deportivo le llega la oportunidad de reseñar el primer título de una franquicia.
Caribes venció con honor, valentía, empeño y de forma muy merecida, especialmente porque superó a un equipo tan complicado como los Tigres de Aragua, que parecen nunca rendirse.
Esta serie final estuvo muy emocionante y no podría terminar de otra forma que con la carrera del empate en tercera, este conjunto de Caribes logró un título con todo el mérito posible, porque encontró en Aragua, al mejor rival que podría ponerlos a prueba.
¡Felicitaciones Oriente, bien merecida su corona!