Hay «70 a 80 centímetros de agua en dos carreteras» que llevan al aeropuerto de Don Mueang, indicó a la AFP un portavoz de Aeropuertos de Tailandia. «Estamos luchando contra el agua», agregó.
El aeropuerto, en el que se encuentran el centro de crisis del gobierno y miles de damnificados, está protegido por diques construidos con bolsas de arena y estaciones de bombeo.
Las autoridades de la capital, que tiene 12 millones de habitantes, advirtieron que seis distritos estaban amenazados.
Las autoridades ordenaron a algunos hospitales que preparen reservas de medicamentos para un mínimo de tres semanas, en momentos en que la universidad Thammasat, en la que también había damnificados, empezó a evacuarlos el lunes, tras alcanzar las aguas 1,5 metros de altura en el campus universitario.
El gobierno trató de impedir durante mucho tiempo que las aguas llegasen a la capital.
Pero esa batalla se perdió, y la cuestión ahora es si se logrará impedir que el centro histórico y el barrio financiero y comercial acaben inundados.
Las inundaciones, causadas por una temporada de lluvias anormalmente intensa, causaron ya la muerte de más de 900 personas en el sudeste de Asia, 350 de ellas en Tailandia.
El combate va a durar «de cuatro a seis semanas», declaró el sábado la primera ministra Yingluck Shinawatra.