El nuevo presidente del Banco Mundial, el estadounidense David Malpass, dijo este jueves que son los accionistas de la institución quienes deben decidir cuándo y cómo comprometerse con la crisis en Venezuela.
“El banco va a estar involucrado a medida que la situación evolucione y nos estamos preparando para eso”, dijo Malpass a los periodistas en la reunión de primavera del organismo. El funcionario dijo que Venezuela es “una gran preocupación”, ya que el país está sumido en una “crisis humanitaria”.
“Con respecto a la arista política, vamos a actuar guiados por la comunidad internacional y las posturas de los accionistas”, dijo. Malpass aclaró que esto es algo que no decide el banco, pero sí sus accionistas. La legitimidad del gobierno de Venezuela está en cuestión desde enero, cuando el líder opositor Juan Guaidó desafió la autoridad de Nicolás Maduro, en medio de una aguda crisis económica.
El Fondo Monetario Internacional advirtió el miércoles que el acceso de Venezuela a sus fondos está supeditado a que sus miembros resuelvan la situación sobre el reconocimiento del gobierno en Caracas.
Maduro, quien asumió un segundo mandato hasta 2025 el 10 de enero luego de unas elecciones cuestionadas dentro y fuera de Venezuela, sigue siendo el presidente en el poder, con apoyo interno de los militares y externo, en particular, de Rusia y China. Pero Guaidó, el jefe parlamentario que el 23 de enero se declaró presidente interino con miras a establecer un gobierno de transición y organizar nuevos comicios, ha sido reconocido por más de 50 países, incluido Estados Unidos.