El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó hoy el reciente tiroteo en Oregón y expresó su confianza de que EE.UU. pueda dar los pasos necesarios frente a la “terrible cifra” de víctimas que causan los incidentes de este tipo.
Nueve personas fueron asesinadas este jueves y otras siete resultaron heridas por los disparos hechos por un joven en un centro universitario de Rosebug, en el estado noroccidental de Oregón.
El autor de los disparos fue identificado como Chris Harper Mercer, de 26 años, nacido en el Reino Unido y criado en Estados Unidos, calificado por la policía como un joven reservado y quien murió por disparos de la policía durante el tiroteo.
Ban Ki-moon, en una declaración distribuida por su portavoz, aseguró que “ante esta nueva tragedia” expresa su “firme esperanza” de que EE.UU., con el “robusto proceso democrático” que caracteriza a ese país sea capaz de adoptar las medidas necesarias para “reducir la terrible cifra de vidas humanas que la violencia con armas está causando a la sociedad estadounidense”.
También hace notar que el presidente Barack Obama “ha demostrado constantemente su compromiso en para hacer frente a este flagelo”.
Estados Unidos tiene el mayor índice de muertes por armas de fuego de un país desarrollado.
Desde diciembre de 2012, cuando un joven con problemas mentales mató a una veintena de niños en la escuela primaria de Sandy Hook (Connecticut), la Casa Blanca ha presionado para que se eleven los controles psicológicos y se limite la venta de cargadores de alta capacidad.
Pero legisladores de ambos partidos y la poderosa Asociación Nacional del Rifle se han opuesto a tomar medidas al respecto.