AUSTRALIA.- Ben Stack estaba pescando tranquilamente, cuando de repente su caña comenzó a tironear. Esta será la presa soñada pensó Ben, pero para su sorpresa el pez estaba acompañado de una sorpresa insólita: un cocodrilo.
“Me encontraba plácidamente en mi bote, cuando de repente comencé a sentir el tironeo, el peso de la línea era importante, pensé que mi línea se había atascado con alguna rama”, comentó Ben.
“El agua estaba un poco turbia, así que me asome de lado de la embarcación para poder apreciar con mayor detalle lo que traía la línea”, dijo y agregó que, “lo que pasó en los próximos segundos, me pareció toda una vida”.
“En primer lugar vi el señuelo en la boca de un gran pez, me incliné un poco más para levantarlo. En ese momento veo unos ojos grandes emerger del agua. Me di cuenta que estaba cara a cara con un gran cocodrilo”, aseguró.
“Uno de mis compañeros cortó la línea y me lanzó inmediatamente para la embarcación. No podía creer lo que había ocurrido”, concluyó Ben.