En el proyecto se plantea que “el latifundio, así como la tercerización, son mecanismos contrarios a los valores y principios del desarrollo agrario nacional y, por tanto, contrarios al espíritu, propósito y razón de la presente ley”.
El presidente de la comisión de Desarrollo Económico, diputado Mario Isea, explicó que la reforma toma en cuenta los artículos 305, 306, 307 de la Constitución, que expresa -entre otros aspectos- que el Estado debe promover la agricultura sustentable, “por lo tanto debemos eliminar la tercerización”.
Isea agregó los cambios propuestos recoge los “anhelos” de los campesinos, quienes fueron los que atendieron al llamado de consultas promovidaes por el Gobierno. “por eso con mucha tranquilidad y conciencia la aprobamos, para beneficia a cientos de miles de campesinos”.
La reforma plantea el principio socialista según el cual “la tierra es para quien la trabaja”.
Al respecto, el diputado Carlos Escarrá manifestó que el derecho de propiedad no es pleno, y menos en materia agraria. “Ya basta que el gran capital, el latifundista en tierras que son para sembrar, coloque ganado y degrade la tierra”, manifestó en su derecho de palabra.
Según Escarrá, lo que se pretende con los cambios al instrumento jurídico es reivindicar al Estado como ente rector de los procesos productivos y a los campesinos como agentes activos del mismo.
El Universal