“Tenemos que preservar la hermandad con el pueblo de Venezuela. He causado problemas por haber hecho un cambio en política internacional. Por haber dicho que no nos pueden consolar dándonos palmaditas de pésame en los hombros (…) Por haber reclamado que en ningún lugar se puede esconder el terrorismo”, dijo.
Durante la ceremonia de aniversario del diario La Opinión, en la ciudad de Cúcuta -fronteriza con Venezuela-, el mandatario abogó por que su salida de la presidencia “produzca un nuevo aire en los gobiernos extranjeros, para no afectar el derecho de los ciudadanos de frontera”.
“Eso sí, que todo se restablezca, pero hay un punto que no se puede restablecer: la vieja equivocación de creer que, por generar complacencias en las relaciones internacionales, no se podía reclamar contra la presencia de terroristas de Colombia más allá de las fronteras“, añadió.
Uribe, en el poder desde agosto de 2002, dijo ser consciente de que “una política internacional firme, que ya no tenga la causa de animosidad que mi presencia genera, firme y prudente, puede ayudar a que se restablezcan plenamente los derechos históricos de los ciudadanos de frontera”, enfatizó.
“Preocupado porque le vaya mal a la economía del vecino”, Uribe dijo aspirar a que “se restablezca la capacidad adquisitiva del hermano pueblo de Venezuela“. “Es muy difícil que un hermano prospere, si el otro no prospera. Necesitamos la prosperidad de todos”, concluyó.
Venezuela congeló sus relaciones con Colombia en julio de 2009 debido a un acuerdo militar entre Bogotá y Washington que permite a Estados Unidos el uso controlado de siete bases militares en Colombia. En consecuencia, el comercio bilateral cayó 70% en el primer trimestre de 2010.
En las elecciones presidenciales colombianas del 30 de mayo, el candidato oficialista, Juan Manuel Santos, crítico de Hugo Chávez, ocupó el primer lugar pero no superó el 50% de los votos, por lo que disputará la jefatura de Estado con el independiente Antanas Mockus, en el balotaje del 20 de junio.
AFP