Una medida se giró a la banca zuliana hace unos siete días. Los cobros de cheques y retiros en efectivo no superarían los 40 mil bolívares. Lo que se desconoce hasta hoy es el motivo.
Fuentes internas de instituciones bancarias precisaron que la escasez de producción de billetes de alta denominación es uno de las fallas que arropa al sistema. Y una de las informaciones que más circulan en los organismos es que el control responde también a los impactos del “bachaqueo” de billetes de 100 y 50 bolívares hacia Colombia.
Hasta hoy existe un escenario incuestionable y que se torna minuto a minuto más especulativo entre los usuarios. La información oficial no llega. ¿Por qué la Superintendencia de las Instituciones del Sector Bancario (Sudeban) no aclara la medida, al parecer tomada estrictamente en Zulia? ¿Hasta dónde durará la limitación y control en el cobro de cheques y retiros de efectivo?
El twitter da muestras de la inconformidad y la desinformación. Un usuario identificado @freddyzur ha escrito: “Hoy fui al Banco Mercantil y el cajero dijo que lo máximo para el cobro de cheques es de 40 mil bolívares ¿Corralito?” El mensaje encuentra réplicas instantáneas y temerosas por igual. @CarlosramírezI3 ha lanzado: “Mi consejo, quien tenga un dinerito en el banco que lo saque, o por lo menos que saque un poco. Vienen restricciones en este sentido”. La situación se oscurece mientras más se leen los tuits de usuarios carentes de datos oficiales.
Francisco Martínez, presidente de Fedecámaras, endosa la situación a la escalada inflacionaria en el país y detalla que las transacciones ejecutadas a diario, definidas por grandes sumas producto de los altos precios, han limitado el acceso a los billetes de elevada denominación por su constante demanda.
“La medida va en función de un problema que tiende a agravarse, y la única forma de solventarlo es que el BCV termine por tomar la decisión de billetes de más alta denominación, cosa que nadie se explica por qué no han hecho hasta el momento”, dijo a Versión Final.
Desde la UCV
Y en ello coincide Luis Angarita, economista e investigador de la Universidad Central de Venezuela (UCV), quien afirma que el punto no es la liquidez monetaria, sino la moneda circulante en la nación. “El BCV se resiste a imprimir el billete de más alta denominación y eso ha generado una mayor demanda por parte de los usuarios”.
Para Angarita la solución podría darse en un corto plazo. Opina que mejorando la capacidad de producción de billetes de 100 y 50 bolívares se nivelará el acceso.
A la fecha tampoco el BCV plantea una explicación para la medida tomada en Zulia. Usuarios demandan una flexibilización puesto que los retiros de sumas significativas se vuelven cada vez más engorrosos en monedas de baja denominación.
Pedro Colmenárez, un ahorrista, necesitó cobrar un cheque hace dos días para cubrir un gasto de salud de urgencia. Su retiro era precisamente de 40 mil bolívares. “Salí del banco con dos bolsas de hielo cargadas con billetes de 2 bolívares”. Una ecuación simple confirma el escenario, Colmenárez debió salir de la entidad con 20 mil billetes, una falsa tentación para el hampa.
Iván Cañizalez, decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad del Zulia, refiere que la medida se enmarcaría en una estrategia para, efectivamente, frenar el bachaqueo. “Pero siempre buscarán una salida a la restricción. No tendrán éxito, es solo otra forma de control del Gobierno”, apuntó.
Pero el decano agrega una matemática simple para delinear el contexto: “El valor del papel moneda, la tinta, entre otros factores que componen el proceso de producción de la moneda nacional, es mucho más costoso que el valor monetario de adquisición de los bolívares venezolanos. De ahí sobreviene las largas colas en los cajeros automáticos y como consecuencia los bancos no dan abasto ante esta situación”.