El proyecto nace con el apoyo de estudios como Fox, Paramount, Sony, Universal y Warner. La parte tecnológica la aportan empresas como Microsoft, IBM, Nokia, Intel, Motorola o Samsung, todos ellos miembros del consorcio Digital Entertainment Content Ecosystem (DECE) desde donde se promueve UltraViolet.
Comprando películas UltraViolet
Cuando uno compra una película UltraViolet, puede hacerlo en soporte físico, como un DVD o un Blu-Ray, o bien mediante una descarga o en streaming. En realidad lo que se compra, no es un disco físico, sino el derecho permanente a acceder al contenido de esa película. Esto significa que UltraViolet mantiene un registro centralizado de licencias, y sabe qué usuario compró qué película. Aunque se compre un DVD, la misma adquisición dará derecho a acceder al contenido a través de otro medio, como una descarga.
Inicialmente los soportes offline serán el DVD y el Blu-Ray, lo que hace el sistema compatible con la distribución tradicional, aunque los que tienen más futuro son los online: descarga del fichero o reproducción en streaming desde una web autorizada. En este caso la película podrá verse mediante cualquier dispositivo conectado a la red, como un ordenador, smartphone o tablet.
Una cuenta para compartir contenidos con hasta 6 personas
El cliente se identifica mediante una cuenta. Pensada para una familia, podrán asociarse hasta seis personas y compartir entre ellas todo el material que hayan ido adquiriendo.
Por ultimo, los dispositivos empleados para la reproducción, deberán soportar el estándar UltraViolet. Si por ejemplo, se trata de un media center conectado a Internet, simplemente introduciendo los credenciales de nuestra cuenta UltraViolet, obtendremos el acceso a todos los contenidos adquiridos en el pasado. Cada cuenta podrá asociar hasta un máximo de 12 dispositivos simultáneos, entre ordenadores, móviles o tabletas y reproductores.
Tal y como está planteado, UltraViolet parece realmente interesante. Los límites, como los 6 usuarios de la cuenta o los 12 dispositivos que pueden asociarse, parecen bastante razonables, sobre todo si los comparamos con los que traían otros sistemas de protección que en el pasado ha intentado implantar la industria, como el DRM. Además, tiene varias ventajas. Los contenidos adquiridos se almacenan remotamente y ese espacio lo proporciona el sistema UltraViolet, así que no supone un coste adicional para el cliente. Puesto que los datos se almacenan remotamente, no hay riesgo de que se deterioren, se pierdan o se raye un DVD.
Sobra decir, que para que todo esto funcione, hará falta disponer de un acceso a Internet con suficiente caudal y sin ningún tipo de limitación de tráfico