El último informe de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), emitido a las 08.15 horas locales (14.15 GMT), da cuenta de 152 muertos, 87 heridos y 100 desaparecidos.
«Agatha», que también ha afectado a Honduras y El Salvador, deja una cifra preliminar de diez muertos y dos desaparecidos en este último país y de 17 muertos y un desaparecido en el primero.
Según la Conred, en Guatemala los damnificados ascienden a 42.286, los afectados a 128.149, hay 124.835 personas que han sido evacuadas y 64.383 se encuentran refugiadas en albergues.
Además, 28.264 guatemaltecos se encuentran en riesgo, las viviendas dañadas por el fenómeno natural son 21.927.
La tormenta tropical también derrumbó en Guatemala 18 puentes y ha causado daños en varias carreteras del interior del país.
El portavoz de la Conred, David de León, dijo hoy que se mantiene una alerta roja institucional para seguir dando asistencia y ayuda humanitaria a los damnificados.
Las autoridades de Protección Civil han abierto en los 22 departamentos que tiene Guatemala centros de recepción de ayuda, mientras continúa la evaluación de los daños y pérdidas económicas causada por «Agatha».
El presidente de Guatemala, Álvaro Colom, calificó ayer lunes de «tragedia humana, social y económica» la provocada por la tormenta.
Colom manifestó que toda la ayuda humanitaria que reciba su Gobierno se centralizará en la Conred para evitar su «politización».
La Conred reiteró hoy su llamamiento a la población para que tomen las precauciones debido a que los ríos de la costa sur, en el Pacífico, y del Caribe, se mantienen crecidos.
El director del Instituto Nacional de Meteorología, Eddy Sánchez, dijo que varias regiones del Atlántico están inundadas por el desbordamiento del río Motagua.
Desde el pasado fin de semana, el presidente decretó el estado de calamidad pública en todo el país con el fin de atender a los miles de damnificados por la tormenta, una tarea que se ha visto entorpecida por los daños que se registraron en las carreteras.
Colom ha manifestado que la ayuda humanitaria ha comenzado a fluir a las zonas más afectadas y más apartadas del país.