Con respecto a generaciones móviles anteriores, 5G ampliará su valor como infraestructura de conectividad gracias a considerar, desde su estandarización, una variedad de casos de uso con potencial disruptivo. El extracto del estudio “Innovación en servicios 5G: salud, drones, banda ancha y realidad extendida” expone algunos de los retos que tendrán las redes de próxima generación como plataforma de esos servicios.
La atención médica se presenta como una de las oportunidades para el crecimiento del Internet de las Cosas (IoT) en Latinoamérica hacia 2022, con Colombia, Chile y México como algunos de los potenciales focos de crecimiento. La estandarización de 5G ya prevé necesidades del sector salud, como cobertura móvil confiable para vehículos o conectividad para tecnologías de asistencia médica en instalaciones. Es necesario que la tecnología se complemente con legislación y acciones que promuevan la seguridad en el manejo de la información clínica.
El acceso fijo-inalámbrico a Internet ya existe en varios países latinoamericanos, pero 5G puede darle un impulso adicional, sobre todo como una alternativa a tecnologías cableadas en áreas de difícil acceso o sin servicio. El reporte detalla que hay varias configuraciones para hacer llegar el servicio a hogares y edificios, pero que es central la existencia de espectro suficiente y redes de transporte. La banda de 3,5 GHz es una de las que pueden apoyar el desarrollo de este servicio a nivel internacional y es importante que los gobiernos consideren el potencial del rango 3,3-3,7 GHz como espectro para este caso de uso.
Los vehículos aéreos no tripulados (VANT) o “drones” pueden tener impacto en varios sectores, como en la agricultura, el transporte de mercancías o en las ciudades como una herramienta de monitoreo de infraestructura crítica. Si bien ya se contempla el servicio a los VANT utilizando redes Long Term Evolution (LTE), su potencial se desarrollaría con redes 5G para integrar comunicaciones altamente confiables y mejores capacidades de transmisión de video. Debido a que es un caso que requiere cubrir grandes distancias más allá de la línea de visión, se requerirá que las redes 5G estén disponibles y tengan capacidad suficiente en varios puntos geográficos.
Los trabajos para estandarizar 5G atienden algunos casos de uso novedosos, pero se contempla que surjan aplicaciones que aún no se conocen, como ocurrió con las generaciones móviles previas. Es importante que los gobiernos nacionales en Latinoamérica promuevan mejores prácticas para permitir que la nueva generación de tecnologías móviles cuente con suficiente espectro radioeléctrico y un marco favorable a la instalación de más infraestructura.
El estudio completo se puede leer aquí